Hoy les traigo a Ted Kaczynski, más conocido como the Unabomber (University and Airline Bomber), un matemático estadounidense famoso por mandar bombas por correo que mataron a tres personas e hirieron a veintitrés.
Resulta ser que el chabón decía que las tecnologías modernas, al requerir una organización a gran escala, limitaban la libertad y autonomía humana, esclavizándonos para su crecimiento y alejándonos cada vez más de nuestros modos primitivamente “naturales”.
A los 30 años, más o menos, se fue a vivir a una cabaña que construyó él mismo en el medio de la nada un bosque, sin electricidad ni gas ni agua corriente nisiquieraunputoinodoro, para adquirir habilidades de supervivencia que lo hagan autosuficiente. Su campaña terrorista empezó cuando vio que su entorno natural estaba siendo destruido por las industrias. Más específicamente, cuando su “favorite wild spot” fue reemplazado por una ruta se desató su sed de venganza.
Él dice que con el tiempo dejó de creer que era posible una reforma y empezó a apuntar a un colapso violento del sistema industrial, mediante consecuentes actos violentos. Así empezó a armar bombas caseras en su cabañita, destinadas a quienes él consideraba que eran exponentes de ese sistema, en sobrecitos rojos y verdes de regalo para navidad. Una vez que atrajo la suficiente atención, prometió que iba a terminar con los actos terroristas si publicaban en el diario su manifiesto, y sino iba a hacer volar algún avión random a lo 11/9.Un año y medio después de que lo publicaran, a su hermano le cae la ficha y lo manda al frente con el FBI, quienes cayeron con un par de papitas y gaseosas en su cabañita en Montana. No debió haber sido un gran anfitrión, porque lo condenaron a cadena perpetua en la cárcel, la cual muy responsablemente está cumpliendo en la actualidad.
Lo gracioso de todo esto es que estuvo 18 años bombardeando postalmente porque usaba materiales antiguos y era imposible rastrearlo por la fecha de fabricación de los componentes, y los sistemas de seguridad no estaban preparados para lidiar con esta
Cualquiera pensaría que al flaco se le fue un poco la mano, pero convengamos que efectivamente fue el que más -por no decir el único que- se hizo escuchar. Y cuando uno se imagina estando en su lugar, entiende un poco lo que debió sentir. Realmente, hay que tener pelotas para renunciar al aire acondicionado y la estufa, a la heladera y el microondas, a la tele y la computadora, tooodo para asegurarte que sos capaz de vivir sin comodidades. Pensarán que es innecesario tratar de hacerlo, ¿no? A mí personalmente me parece algo bastante sensato; no porque crea que de un día para el otro dejen de estar esas comodidades, sino porque el hecho de saber que cosas tan corrientes como el agua potable se van a ir volviendo un lujo en unos años me hace dudar de qué haría yo si en algún momento dejara de poder costearme una buena vida. Si ahora me da la impresión que no doy abasto con el ritmo en el que se renuevan los productos y aparecen novedades –y desaparecen antigüedades-, pensar en que esa velocidad crezca exponencialmente asusta un poco... ¿qué pasa con los que van quedando atrás?
Igual creo que Kaczkjdajhflkjhrlghjinnski se va un poco al carajo, porque él ya considera a la civilización como antinatural, contraproducente, una porquería, con frases como: “Rules and regulations are by nature oppressive. Even ‘good’ rules are reductions in freedom” y “The system does not and cannot exist to satisfy human needs. Instead, it is human behavior that has to be modified to fit the needs of the system”.
Los humanos siempre tuvimos necesidad de vivir en sociedad y, sumado al crecimiento en la cantidad de ejemplares, es lógico que la sociedad sea más grande y más compleja. La libertad total existiría si fueses el único en el planeta, pero dado que no es el caso, es como la frase esa de 'mi libertad termina donde empieza la del otro', por ende, las reglas son necesarias para tener un mínimo de paz y, a la vez, permitirles a todos tener un espacio donde vivir.
Pero bueno, él cree fervientemente que hay que volver a las leyes de la naturaleza para dejar de destruirla –muy valorable-, y por ende, a una vida precaria –si me sacan la tele, mato gente-. Suponiendo que de alguna forma se diera cabida a su utopía, el precio que tendríamos que pagar es el de no menos que billones de vidas humanas. Porque claro, cada uno se tendría que abastecer con lo que sí mismo puede obtener y/o producir, y con la cantidad de personas que somos, tener un cachito de tierra donde plantar un brócoli sería tener muchísima suerte. Y eso suponiendo que no te vienen encima los guardaespaldas de Ricky Fort a aplicar el concepto de 'la supervivencia del más fuerte'. Además, si ahora nos horroriza la situación de los más desamparados, imagínense que éstos serían el clero del nuevo mundo. Pero bueno, el Unabomber está dispuesto a tomar esos riesgos: “For those who realize the need to do away with the techno-industrial system, if you work for its collapse, in effect you are killing a lot of people. If it collapses, there is going to be social disorder, there is going to be starvation, there aren't going to be any more spare parts or fuel for farm equipment, there won't be any more pesticide or fertilizer on which modern agriculture is dependent. So there isn't going to be enough food to go around, so then what happens? This is something that, as far as I've read, I haven't seen any radicals facing up to.” Menos mal que no llegó a presidente de Estados Unidos.
Es verdad que la sociedad como la conocemos hoy trajo aparejados muchos puntos negativos para nosotros mismos, pero también trajo muchos positivos. Si a Ted Kaczynski le parecía que nos habíamos pasado de la raya y que nuestro lugar era el de la sociedad preindustrial –siendo muchísimos menos y viviendo muy rascamente- me parece que en vez de irse a Montana se tendría que haber ido al Amazonas que ahí seguro no le clavan una carretera en su sala de té para recibir visitas entre el roble y el cedro. El tipo a la fuerza quería cambiar la sociedad a algo que a él le gustaba sin preguntar si los demás estábamos de acuerdo. Bueno, yo voto por restringir un poco mi libertad a cambio de organización, arriesgarme a los traumas a cambio de la complejidad, jugar un poco con fuego a cambio de saber y entender, ser dependiente a cambio de un mejor estilo de vida. Pero lo que creo que no nos podemos dar el lujo de hacer es tomar tanta posesión del planeta y tratarlo como si fuésemos los creadores, cuando somos simples huéspedes.
Igual, plantea muchas cosas interesantes para poner en consideración. Acá les tiro un par de ítems de su manifiesto:
● In modern industrial society only minimal effort is necessary to satisfy one's physical needs.
● A theme that appears repeatedly in the writings of the social critics of the second half of the 20th century is the sense of purposelessness that afflicts many people in modern society.
● But even if we are wrong, the increasing rate of depression is certainly the result of SOME conditions that exist in today's society. Instead of removing the conditions that make people depressed, modern society gives them antidepressant drugs. In effect, antidepressants are a means of modifying an individual's internal state in such a way as to enable him to tolerate social conditions that he would otherwise find intolerable.
● It is important not to confuse freedom with mere permissiveness. It is not possible to make a LASTING compromise between technology and freedom, because technology is by far the more powerful social force and continually encroaches on freedom through REPEATED compromises.
● Its is important, too, to realize that deadly violence among primitives is not even remotely comparable to modern warfare. When primitives fight, two little bands of men shoot arrows or swing war-clubs at one another because they want to fight; or because they are defending themselves, their families, or their territory. In the modern world soldiers fight because they have been brainwashed into believing in some kook ideology such as that of Nazism, socialism, or what American politicians choose to call "freedom". In any case the modern soldier is merely a pawn, a dupe who dies not for his family or his tribe but for the politicians who exploit him. If he's unlucky, maybe he does not die but comes home horribly crippled in a way that would never result from an arrow- or a spear-wound. Meanwhile, thousands of non-combatants are killed or mutilated. The environment is ravaged, not only in the war zone, but also back home, due to the accelerated consumption of natural resources needed to feed the war machine. In comparison, the violence of primitive man is relatively innocuous.
● The industrial-technological system may survive or it may break down. If it survives, it MAY eventually achieve a low level of physical and psychological suffering, but only after passing through a long and very painful period of adjustment and only at the cost of permanently reducing human beings and many other living organisms to engineered products and mere cogs in the social machine. If the system breaks down the consequences will still be very painful. But the bigger the system grows the more disastrous the results of its breakdown will be, so if it is to break down it had best break down sooner rather than later.
● The techno-industrial system is exceptionally tough due to its so-called "democratic" structure and its resulting flexibility. Because dictatorial systems tend to be rigid, social tensions and resistance can be built up in them to the point where they damage and weaken the system and may lead to revolution. But in a "democratic" system, when social tension and resistance build up dangerously the system backs off enough, it compromises enough, to bring the tensions down to a safe level.
● In any case it is not normal to put into the satisfaction of mere curiosity the amount of time and effort that scientists put into their work.
Revuelve un poco las tripas, pero no puedo evitar sentir que tiene mucha razón. No parece haber motivos para tener miedo porque todavía no hubo ni un atisbo de que las máquinas estén tramando un plan de dominación mundial, pero pase lo que pase, es seguro que nos estamos haciendo cada vez más dependientes a la tecnología. Por un lado, no parece estar mal; siempre vamos a ser dependientes a algo para existir: la tierra, el aire, el agua… no pareciera que vendimos nuestras almas por introducir una dependencia más a cambio de un poco de confort. Pero después ves cómo la tecnología y la industria crecen en detrimento de la ecología y la naturaleza, y ahí si uno se empieza a sentir del lado del diablo. Porque estamos seguros que la ecología y la naturaleza son sinónimo de un planeta sano y, esperemos que, duradero. Pero las comodidades artificiales que catalogamos como enemigas de la vida natural, serían por consiguiente asesinas del planeta. Extrapolemos todo por un momento: desarrollamos una tecnología sin límites al precio de transformar la tierra en un lugar totalmente árido, pero bueno, por lo menos podemos crear agua y comida de la nada apretando un botón.
Pero como somos re guachiguau, lo predijimos y nos tomamos el palo en nuestras naves intergalácticas. ¿Qué sigue? ¿Hacer una colonia e ir destrozando planeta por planeta? ¿Y así hasta que no quede más lugar habitable en el universo, o hasta que vengan Kodos y Kang de improvisto un día que no teníamos tablas con clavos? Y eso sin mencionar como nos cagamos en las plantas y los animales –¡ellos también tienen sentimientos! (?)-. Nah, la verdad lo nuestro es egoísmo puro. Muy lindo tener curiosidad, creatividad e inventiva, pero como dice el muchacho bombardero, el hecho de que podamos ¿significa que debamos? Y como le dice su tío a Peter Parker, “un gran poder conlleva una gran responsabilidad”. Pero bueno, como el fumador preocupado por el cáncer de pulmón que muere en un accidente de tráfico, supongamos que nos estamos haciendo mucho la cabeza y en realidad en 10 años nos cae un meteorito o nos chupa un agujero negro y todo fue al pedo.
Pero igual, el vaticinio paranoico estándar siempre va a estar: “But we are suggesting neither that the human race would voluntarily turn power over to the machines nor that the machines would willfully seize power. What we do suggest is that the human race might easily permit itself to drift into a position of such dependence on the machines that it would have no practical choice but to accept all of the machines decisions. As society and the problems that face it become more and more complex and machines become more and more intelligent, people will let machines make more of their decision for them, simply because machine-made decisions will bring better result than man-made ones. Eventually a stage may be reached at which the decisions necessary to keep the system running will be so complex that human beings will be incapable of making them intelligently. At that stage the machines will be in effective control. People won't be able to just turn the machines off, because they will be so dependent on them that turning them off would amount to suicide... Technology will eventually acquire something approaching complete control over human behavior.”
No me resulta muy realista hoy por hoy el concepto de “máquinas inteligentes”. Es como que la gente se olvida que, por más compleja que sea la máquina y por más que cada vez sea menos la gente que comprenda el funcionamiento de una de principio a fin, son los humanos las que las diseñaron, programaron y construyeron para que den respuestas más rápidas a problemas más complejos. Las máquinas no son más inteligentes; solo se las van complejizando. Siguen siendo un montón de circuitos preparados para hacer algo en cierta circunstancia. Pero lo cierto es que, hace varios siglos era mucho menor el repertorio de conocimientos universales, por ende estaba más al alcance de todos poseer gran porcentaje del mismo. Ahora es tanto que con suerte nos podemos especializar en una partecita, pero no nos da la vida ni las energías para pretender entender y saber hasta el último dato que repercute en nuestro campo. Y creo yo, que genera una “desconfianza” saber que solo aportamos una partecita y que no podríamos con el todo sin necesitar de otros especialistas en otras partecitas. Creo que eso hace que se sienta como que la tecnología nos domina, pero la verdad es que –por lo menos hasta ahora- seguimos siendo nosotros los que decidimos seguir y seguir avanzando.
Kaczynski dice que es imposible escaparse de la tecnología industrial por varios motivos: porque si usás cualquier parte de ella, el sistema demanda servilismo; porque la tecnología no se “revierte” a sí misma, y nunca libera lo que toma; porque no tenemos elección de qué tecnologías usar a largo plazo.
Entonces, la duda que, por lo menos a mí, me introdujo el señor este es: la ciencia, ¿puede permitirse avanzar sin ningún tipo de regulación bajo el slogan de descubrimiento y desarrollo? ¿No hay consecuencias en llegar tan lejos? Porque si el problema solo se trata de no ir en contra de la naturaleza, ya se están desarrollando tecnologías bioambientales que minimicen este problema. No, el miedo viene de pensar qué haríamos si colapsara la tecnología, o peor, si nos gobernara. Parece muy volado considerar seriamente una teoría que te plantea una novela o una película de ciencia ficción porque parece tan lejano a hoy. Por otro lado, parece necio autolimitarse tanto como para volver a una época medieval apestosa y llena de excrementos solo por la incertidumbre del “y si” y la intolerancia a los “pero”. Es innegable que al abrir la posibilidad de conseguir un montón de cosas, consideradas valiosas, margina a aquellos que no llegan a conseguirlas, amplia más la brecha, genera infelicidad, insatisfacción, angustia. Pero es sumamente estúpido para mí pensar que la solución es quitar esas posibilidades de una y que estemos todos ‘igual de mal’. La angustia nunca se va a erradicar, la competencia y la supervivencia del más fuerte tampoco. Solo se reemplazan por otras formas. Cambiamos el peligro de que un animal pueda atacarte en tu cuevita en la montaña por poner policías y cárceles, pero estar a merced de recibir abusos desde otros lados. ¿Piensan que sin la globalización y la cantidad descomunal de gente que hay no habría crímenes horribles? Si que los habrían, y como nadie se enteraría ni sancionaría, probablemente serían de un porcentaje muchísimo mayor.
Pero, ¿quién me dice que actualmente no hay alguien en el mundo en plan de diseñar inteligencia artificial verdadera, o alguna estupidez por el estilo? Ya se pasaron tranquilamente de los límites de lo que es moral para la mayoría con cosas como usar células madre de embriones para curar gente, o más fácilmente, el aborto. ¿Qué pasaría si lograran algún tipo de avance que se les fuera de control? Y no hablo de un Chernobyl en el que las cosas salieron mal; hablo de algo que les saliera demasiado bien.
En esta sociedad uno está expuesto a muchos vicios poco saludables que no estarían en una sociedad puramente rural, pero también está al alcance de la mano una vida sana y plena, que la precariedad nunca podría ofrecer. No creo que sea justo quitarles a todos esa posibilidad debido a que muchos se ‘descarriaron’ y cayeron ante lo nocivo.
Sí, es verdad que el sistema complejo como es hoy restringe bastante la libertad de uno, pero también abre muchas nuevas posibilidades: como leí por ahí un ejemplo, sobre qué hacer una tarde: viviendo como un ermitaño en una montaña tenés menos opciones pero total libertad; en cambio, en nuestra sociedad, están más delimitados los modos de actuar, pero hay muchas más opciones a disposición. Cada uno decidirá qué tanto se deja absorber por las comodidades. Supongo que no estamos en derecho de exigir que dejen de buscarlas.
"And let us dream now the impossible dream of a math professor"
ResponderBorrar"And let us never forget that the human race with technology is like an alcoholic with a barrel of wine"
"Blandly titled industrial society and its future"
"Because we can"
Sleepytime Gorilla Museum ~ FC: The Freedom Club
la cantidad no representa calidad...
ResponderBorrarMuy bueno todo...esta interesante lo que platea pero se va un poco al carajo.
ResponderBorrarIgual la cagaste cuando nombraste a Fort (de ahora en más, El Que No Debe Ser Nombrado)
Comparto con el tipo la idea de que la sociedad tiene que dar un vuelco porque si no la existencia humana se va a tornar insostenible. Como vos misma lo dijiste, el hecho de la gran cantidad de novedades y el descarte de elementos que van siendo reemplazados por unos levemente mejorados está produciendo daños irreparables tanto en el medio ambiente como en la psicología social.
ResponderBorrarPero no creo que el responsable de todo esto sea el avance tecnológico sino el sistema de producción, distribución y consumo. Hay quienes sostienen que con la tecnología que contamos hoy en día se podrían producir instrumentos tan duraderos como una vida humana y mil veces más avanzados y efectivos que los que existen en el mercado, así como también con la cantidad de alimento que se produce ahora mismo se podría alimentar a toda la población mundial tres veces por cinco años. Sin embargo el hambre sigue existiendo en el mundo y nosotros seguimos renovando nuestros electrodomésticos cada año.
La razón es muy simple: existe un sistema vigente llamado capitalismo, que mueve al mundo y que su principal función es hacer que pocos tengan mucho mientras que muchos no tienen nada, y para eso necesita un mecanismo en movimiento constante, por lo que necesita productos de mala calidad que tengan que ser reemplazados y también necesita gente que trabaje para conseguir y/o fabricar esos productos, así que ahí tienen un dos en uno. Te recomiendo un video que anda dando vueltas por youtube que se llama "The story of stuff" o la historia de las cosas. Si no lo viste, miralo. Explica muy claramente lo que acabo de poner.
En cuanto al planteo general de Kaczynski, por ahí estoy de acuerdo en sus planteos pero estoy en total desacuerdo en sus modos.
Para empezar, con el concepto de civilización, éste lo plantea como algo antinatural, lo cual, si bien no es algo que me convenza del todo, no me parece para nada descabellado.
El primer ser humano en plantear a la sociedad como una respuesta natural fue Aristóteles, al plantear que "Sólo los semidioses y las bestias son capaces de vivir los unos aislados de los otros".
Hoy en día se conocen muchos casos de ermitaños (incluso el mismo
Kaczynski es uno de ellos) que no sintieron la necesidad de interactuar con otros seres humanos para subsistir, y que sin embargo fueron capaces de profundizar planteos existenciales fascinantes. Pero lo que sucede es que estamos demasiado acostumbrados a vivir en sociedad como para concebir otro tipo de existencia. Si el estado, las reglas y el mercado se abolieran, el hombre planearía mentalmente el reestablecimiento de un mercado primero, un sistema legal y un pseudoestado después y finalmente por ahí algún credo, simplemente por el condicionamiento que ejerció sobre él la sociedad durante miles de años. No creo que esto sea natural porque no creo en la naturaleza humana, pero sí creo en la condición humana, y esto es algo de lo que no se puede escapar fácilmente.
Otro planteo que surge es el problema de la libertad. Según Kaczynski: leyes, estado y mercado = esclavitud; y anarquía = libertad. Esto es altamente discutible justamente por esa idea de que “mis derechos terminan donde empiezan los del otro”. Por esa razón existe una anarquía colectivista, que respeta dicho principio, y una anarquía individualista, que es la que plantea Ted. Pero ¿Cómo podemos ser totalmente libres si estamos siendo limitados por los demás? Y si vamos más a fondo todavía: ¿Cómo podemos ser totalmente libres si estamos siendo limitados por nosotros mismos? Creo que esta última pregunta no se la planteó nuestro amigo Ted. Al fin y al cabo somos organismos regidos por las leyes de la física, con limitaciones innumerables ya de por sí, y eso hace que el libre albedrío sea por definición imposible. Yo no puedo elegir no comer ni beber y seguir viviendo, ni tampoco puedo elegir saltar por la ventana y volar por los aires, ni convertirme en un enjambre de abejas, tengo mis limitaciones físicas ante todo, por lo tanto la libertad absoluta es inalcanzable, al menos en el plano físico. Si hay una razón por la que me parece factible tomar a la naturaleza más en serio no es por la cuestión de la libertad sino más bien por mantener un equilibrio de fuerzas, que hoy en día no se respeta ni un poco, y nos está acortando la vida considerablemente.
ResponderBorrarLa cuestión de las vidas humanas que se tienen que perder para que el ser humano vuelva a ser regido por las leyes naturales puede sonar maquiavélico pero no es nada demasiado diferente de la postura que se tiene actualmente en relación con las guerras. El sustento ideológico de las guerras hoy en día (si es que no fue así siempre) es simplemente una fachada que se utiliza para lavarles la capocha a los soldados y darle una razón por la cual luchar. Las verdaderas tres funciones de la guerra, en orden de importancia son:
1-Obtención de recursos
2-Evitar la cristalización económica mundial (las guerras son el negocio más ágil que existe).
3-El control demográfico.
Muchos países europeos salieron de una crisis post guerra y hoy se convirtieron en superpotencias justamente por la barrida demográfica, ya sea buscada o no, que significó su derrota en la guerra. Actualmente países como Estados Unidos mandan a la guerra a inmigrantes ilegales y a desempleados, prometiéndoles una excelente paga o la ciudadanía estadounidense, y así de deshacen de ellos y “limpian” su población. Así que, aunque parezca chocante el planteo de nuestro anarcoamigo, no es muy diferente del que se sostiene hoy en día para el control de la sociedad.
La sociedad depresiva también es un fenómeno buscado: mientras peor nos sentimos con nosotros mismos, más ganas vamos a tener de buscar consuelo en el mercado. Lo único que hacen las publicidades es decirnos lo patéticos e insignificantes que somos si no compramos el producto que están publicando. Y las famosas píldoras de la big pharma son para que la depresión no se les vaya de las manos. No queremos una sociedad tan deprimida que organice un suicidio en masa, queremos una sociedad levemente depresiva y pusilánime, lo suficiente como para que haga lo que nosotros le pedimos, y para hacerles creer que las decisiones las toman ellos. Nosotros los obligamos a ser libres, y les decimos qué es la libertad. En una sociedad comunista, harían lo que les decimos. En una sociedad consumista, harán lo que quieran, pero nosotros les diremos lo que quieren. Y así vivirán en un mundo feliz, y morirán felices sabiendo que tuvieron una vida plena en la que hicieron todo lo que quisieron, o mejor dicho, todo lo que nosotros le dijimos que quisieran.
Ojo, esto tampoco significa que, sacando el mercado de lado y tomando en cuenta las repercusiones del medio ambiente, tengamos que simplemente dejarnos llevar por las máquinas, porque estaríamos dejando de lado la cuestión psicológica y la cuestión evolutiva si se quiere. En waking life hay un profesor de filosofía que dice que los seres humanos como tales no evolucionan, sino que hacen evolucionar su entorno, y el viejo tiene un buen punto. Pongámoslo así: desde la época de Sócrates hasta hoy el campo de las ideas no se desarrolló casi nada en comparación con el campo técnico, por ejemplo. Pero el conocimiento técnico, a su vez, rara vez se transmite tan libremente, a medida que se va haciendo más complejo. Por ejemplo: tengo un lavarropas. Yo no sé cómo funciona el lavarropas, no conozco su funcionamiento interno y a menos que haya hecho un curso especial o que esté informado por mí mismo, no tengo idea de cómo repararlo o fabricar uno. Lo único que sé es que yo pongo la ropa, el jabón, aprieto un par de botones y el sistema automáticamente me lava la ropa. Es un ejemplo medio burdo, porque tal vez si abro el lavarropas podría entender su mecanismo, pero ¿se puede decir lo mismo de un plasma, por ejemplo? ¿o de una computadora o un celular?
ResponderBorrarÉsta es una tendencia constante, los elementos son cada vez más complejos y producen cada vez más necesidad inducida (ej: las necesidades de tener un celular o internet, inexistentes hasta hace quince años), lo que produce que entendamos cada vez menos el funcionamiento de nuestro entorno. No sé qué pasa en el medio, pero sé que si aprieto este botón, obtengo lo que quiero. El ser humano está llegando a una instancia de superchimpancé si se quiere. La tecnología nos facilita tanto el consumo de información que poco a poco nos vamos interesando cada vez menos por la misma, y más por poseer la mayor cantidad de tecnología que nos permita efectuar el menor esfuerzo posible, tanto físico como mental. Y de más está decir que mientras más sofisticados son los artefactos, menos personas en el mundo lo entienden. Esto se empezó a dar a gran escala con el sistema de producción masiva de Ford, que reemplazó la fabricación artesanal de una persona por la actividad subdividida, entre cuyos efectos colaterales se encuentra que ninguno de los fabricadores del producto conozcan el proceso completo de ensamble del mismo sino una parte. Ya en la actualidad existen electrodomésticos que son comprendidos solamente por unas pocas personas en todo el mundo.
Creo que cuando Ted habla del dominio de las máquinas se refiere más a esto (una tecnocracia dominada por unos pocos humanos) que a la idea medio fantástica de que las máquinas desarrollen una consciencia y nos esclavicen. Supongo que su verdadero fantasma es éste, uno que ya está tomando forma. De todas maneras había dicho que no estaba de acuerdo en sus modos, y primero y principal estoy en contra de la violencia y el asesinato para manifestar un ideal. Existen formas no violentas de protestar, como la de Mahatma Gandhi. Tal vez sea un ingenuo, y puede ser que si el enemigo es despiadado, uno debe ser más despiadado todavía, como dicen algunos. Pero por más despiadado que sea el enemigo, siempre tiene un punto débil. La meta no debería ser violentarse contra el enemigo (lo único que hace eso es revitalizar su poder) sino descubrir cómo dejarlo en ridículo. Si amenazo con poner una bomba si no publican mi manifiesto en el diario (dicho sea de paso, está en contra del avance tecnológico en todas sus formas pero empleó como medio un elemento de elaboración tecnológica y que promueve la tecnocracia contra la que el lucha. ¿No hubiera sido más coherente escribir varias copias de su manifiesto y repartirlas él mismo?) digamos que la gente no va a confiar mucho en lo que tengo para decir. “Ah, este es el loco que quería volar todo a menos que le dejen escribir esto. Mirá. Emm… A ver Yo Matías!”
ResponderBorrarBuen, también puede ser que le estemos buscando la quinta pata al gato acá. La vida es lo que es, y es muy difícil que lo cambiemos de raíz justo como nosotros queremos, por no decir imposible. Como una vez dijo un tipo que hacía reír a la gente: “It’s just a ride!”, y en una montaña rusa no nos detenemos a ver cómo funciona, simplemente disfrutamos del viaje y tratamos de hacerlo lo mejor posible. Al fin y al cabo si es que somos eternos, no es acá.
The story of stuff:
ResponderBorrarP1: http://www.youtube.com/watch?v=_xJ9lX47o7I
P2: http://www.youtube.com/watch?v=2o5b3hLB8bo
Faaa
ResponderBorrarQué genio, me encantó
Parece mucho más realista tu opinión del peligro de la sociedad que la suya
Hace que uno entienda cómo llegamos a esto y qué cosas potencian que sigamos manejándonos de esta manera
Ahora, me dejaste con ganas de saber cuál sería tu solución, o mejor dicho, tu forma de mejorar nuestra situación
Yo cuando escucho de todos los males del capitalismo y del consumismo aún así me sigue pareciendo la mejor y más justa opción por alguna razón
Igual me encantaría ser capaz de ver otra más alentadora
Este tipo que hacía reir a la gente una vez dijo:
ResponderBorrar"La vida es como un viaje en un parque de diversiones. Y cuando decides subirte, piensas que es real porque así de poderosas son nuestras mentes. Y el viaje sube y baja, da vueltas y vueltas. Tiene emociones y escalofríos, y colores brillantes, y es muy ruidoso y es divertido, por un tiempo. Algunos han estado en el viaje por un largo tiempo y se empiezan a preguntar: "¿esto es real o es sólo un viaje ?" Y otros se acuerdan, vuelven y nos dicen: "ey, no te preocupes, no tengas miedo, nunca, porque, es sólo un viaje " Y nosotros...matamos a esa gente. "Cállenlo." "Hemos invertido mucho en este viaje. Cállenlo. Miren mis arrugas de preocupación." "Miren mi gran cuenta bancaria y mi familia. Esto tiene que ser real." Es sólo un viaje. Pero siempre matamos a esos buenos tipos que intentan decírnoslo. ¿Alguna vez lo notaron? Y dejamos que los demonios corran libres. Pero no importa, porque, es sólo un viaje. Y podemos cambiarlo cuando queramos. Es sólo una elección, sin esfuerzo, ni trabajo, ni empleos, sin ahorrar dinero. Una elección, ahora, entre el miedo y el amor. Los ojos del miedo quieren que pongas cerraduras más grandes en tus puertas, que compres armas y te encierres. Los ojos del amor, en vez, nos ven a todos como uno. Esto es lo que podemos hacer para cambiar el mundo, ahora, para un mejor viaje. Tomar todo el dinero que gastamos en armas y defensa cada año, y emplearlo para alimentar, vestir y educar a los pobres del mundo, lo cual nos sería recompensado muchas veces. Ni un sólo ser humano excluido. Y podríamos explorar el espacio, juntos, dentro y fuera, por siempre, en paz. "
Yo creo que si existe una "solución", eso se aproxima bastante.
Uff, ¿que las personas se manejen por un honesto amor al prójimo? ¿Que prioricen lo colectivo a lo individual? Eso es utópico.
ResponderBorrarY que no haya ningún humano excluído, eso es imposible. Porque siempre va a haber gente que se excluya por voluntad propia.
Pero bueno, suponiendo que ese fuera el ideal, mal no estaría tratar de acercársele. Estaría buena una sociedad más unida y solidaria -o, por lo menos, considerada-, más allá de si es o no comunista o socialista.
Puede sonar simplista el final, pero me quedo con la idea de que es solo un viaje :p
ResponderBorrarLa idea de amor al prójimo está llena de estigmas, causados por la sociedad, la religion y la soberanía. Nadie ayuda al prójimo incondicionalmente. Lo hacen porque se sienten bien consigo mismos, para alimentar su ego o simplemente para crearle a los demas una falsa idea de ellos mismos. Lo que planteo es algo mucho más profundo. Durante toda nuestra existencia nos vemos como una unidad, separada del todo, cuando en realidad somos una sola consciencia que experimenta consigo misma (de ahí lo del "viaje"). Si hubiera una forma de transformar la consciencia colectiva a tal punto de que veamos los lazos que nos unen con todo lo demás: los otros seres humanos, los animales, las plantas, el cosmos; entonces ahí se daría la solucion, aunque tal vez no la llamaríamos "solución" porque nos daríamos cuenta de que nunca hubo un problema. Es solo una sucesion de eventos. El juicio parte de la consciencia individual únicamente.